El power trío tamaulipeco The Tronautas es una banda de stoner/doom/grunge bastante chida y con una trayectoria buena en sus cinco/seis años de vida. Fundada en 2017 por Mr. Selfdestruct en los tamborazos, RACO en las cuerdas delgadas y las cuerdas vocales y Radiobot en las cuerdas chonchas, y han estado en escena junto a bandas de fuera como Destroyer the light, Uburen o Life in vacuum, y nacionales como The Warning, Massacre 68 o Introtyl, el año pasado, vinieron a tocar en La calaca, espacio cultural, junto a otras bandas muy chidas del CDMx y EdoMex. La banda ha grabado dos Ep's, en 2018 Olovörgo que consta de cuatro canciones y en 2020 In doom we trust, de siete rolas, y con esta breve historia de la banda, puedo adelantarles que es de las que más me han emocionado con una anécdota (que me delata como una simple y mortal bestia): hace un par de años, buscando música en youtube topé un canal (ni recuerdo ahora cuál de todos los que hay) y justo ahí vi que tenían un disco llamado Olovorgo, de inmediato pensé "esto es mexicano, a ver qué onda", me gustó mucho lo que escuché, pero me puse hacer otras cosas (siempre hago algo cuando escucho música), no presté atención y el álbum cambió, cambió el canal, en fin que lo único que recordaba en ese momento fue el título (creí que la banda se llamaba Olovorgo), hasta que The Tronautas me contactó el año pasado para el evento que por infortunio no tuve oportunidad de asistir. Por alguna razón, algo se interpuso entre su música y mis palabras (últimamente mi memoria), pero con la noticia de que están próximos a sacar nuevo álbum de larga duración, me tomo (ahora sí) el tiempo de hablar de su música.
Olovörgo comieza con Last days, una rola que abre con arpegios de lira y luego entran bajo y bataca a secundar en un intro que suena un tanto numetalero, hasta el momento del verso, que se vuelve lento, espesote, con un bajo bien grave y sucio, acompañado de golpes pesados y aplastantes de la batería. Continúa con My god, con un sonido más cercano, nuevamente, al numetal, con un toque de grunge en el sonido de la lira, aunque en esta ocasión la voz trae una especia de chorus/delay que le da un toque clásico muy chingón, a la vez que una sensación envolvente, como si la voz viniera de todos lados y de ninguno en específico. Eso sí, es una rola que de inicio es pesada pero a partir del verso, se van alternando pasajes de lira más aguda y más golpes en la batería, lo que la vuelve un poco más dinámica y menos dura. Eternal gloom, el tercer track, nuevamente comienza con un estilo más metalero, quizá un poco de grunge más crudo y pesado, pues aunque dan esa sensación, hay elementos que impiden meterlo en ese género totalmente, además que ya llegado el verso, se vuelve un poco más doom su ritmo, y tiene un puente tremendamente aplastante, aunque le falta un poco de logreguez para ser totalmente doom. La última rola, titulada To destroy a beautiful thing, inicia con un ritmo un tanto Mudvaynezco (en su disco Lost and found) y un riff de lira muy blackmetalero en sentido de lo estrepitoso y agudo del inicio. En general, todas las rolas siguen un patrón más o menos igual: inicio metalero, verso más denso (casi doom), coro en el que se intensifica el inicio y se mezcla con elementos del verso; y no se me malinterprete, sólo estoy describiendo lo que escucho, pues aunque la banda apenas coquetea con el stoner y el stoner/doom, así como con sonidos grunge, la apuesta por un sonido diferente me parece de lo más genial, pues refresca el género y es una base para madurar una propuesta chingona, que es lo que harán en su segundo Ep.
In doom we trust es su segundo material de corta duración, a través de seis rolas dejan claro que han dejado atrás la experimentación y han sabido integrar ese sonido más cercano al metal noventero con pasajes de psicodelia oscura y doom. Por ejemplo Neilberry drive comienza con un groove de bajo profundo, seco, bien hechecito, que se mantiene por casi toda la canción mientras la batería va añadiendo fills y la lira arreglos muy chingones, con lo que marcan un cambio de dirección, integración y sonido muy importante y muy bueno. En Emptiness inside, vuelven un poco al sonido metalero, pero lo logran integrar de manera más natural a esos ritmos lentos que van añadiendo a la canción, con lo que no sólo se vuelve una rola lenta y viscosa, sino agresiva también; la línea vocal también se adecua mejor a la melodía, dando notas alargadas y melódicas o siguiendo la instrumentalización de forma más chingona. Mechanics of fear comienza con un arpegio de lira bien tétrico, muy a propósito del título, la voz también es más calmada y grave, sin duda es una canción que tiene esa oscuridad y opresión del doom mezclado con los guitarrazos y las notas melancólicas del grunge. The spark es una rola instrumental con puros sonidos ambientales, casi para meditar, evoca lo etéreo, lo inasible, mientras She flies ya está más orientada a una mezcla de stoner rock y grunge, que rompe con ese momento metafísico para llevarnos a la euforia. Lizbeth Salander, en lo musical, vuelve a mezclar lo agresivo y duro del metal noventero con el ritmo espeso del doom, dando como resultado una rola con muchos matices que de repente se separan, de repente se unen para dar como resultado un sonido contundente. El Ep termina con Mantra, como inicia: con una canción instrumental de psicodelia oscura muy bien hecha (al menos de la que a mí me gusta): un bajo persistente en el riff con algunos arreglos repentinos, todo evocando una larga noche desértica por momentos onírica e ingrávida, por otros con ciertos clímax, como si lo interesante de la historia estuviera llegando.
Lo chingón de hacer este tipo de reseñas (aunque breves), y que los Ep's estén separados por un par de años, es que notas esa evolución, de esos primeros intentos experimentales de buscar tu sonido hasta encontrarlo y empezar a darle forma de mejor manera, así que para este nuevo material que grabarán pronto, The Tronautas me deja expectante, seguro la madurez de su música nos traerá nuevos sonidos. En cuanto a este material ya existente, puedo decir, como ya lo he mencionado, que se nota mucho la influencia del metal noventero (nu metal o metal alternativo), y que las pequeñas fallas que tuvieron en el primer EP (pocas, en realidad, y más bien estructurales) las supieron superar y darle un mejor acabado en su segundo EP. Sin duda, Neilberry drive y Mantra son mis rolas favoritas, ¿Cuáles son las suyas?
Para seguir su actividad:
Para escuchar su material:
-Mack
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