Hace ya unas semanas, comenzó la salida de material que si bien aún son pruebitas de lo que se viene, vale la pena habar de ellos de una vez para estar atentos a lo que asoma. Hace un mes, desde Instagram charlé un rato con la mente maestra de Atiza, la one-man band proveniente de Guadalajara y que me mostró dos sencillo que el mes pasado de abril salieron a la luz en Bandcamp, pero que por cuestiones de lanzamientos y otros compromisos no me había dado oportunidad de hablar de ellos. Más próximos al centro, desde el Valle de México, Montsanto ha lanzado unas cuatro rolitas nuevas, que si entendí bien, forman parte de un trabajo más amplio y que se irán liberando de apoco. Siempre es grato recibir noticias de quienes comienzan en el mundo de los riffs densos y quienes de a poco pero con pasos certeros, van adentrándose con música dura y potente.
Atiza, como mencioné al inicio, es una one man band que va explorando su sonido y se le nota mucho las ganas de hacer y trascender en la escena, pues con todas las limitantes que muchas veces representa no encontrar músicos, de no tener esa facilidad de conexión con otros para hacer música, se atreve, como muchos otros solitarios, a crear sin depender de otros, así nace este proyecto tapatío que tuvo a bien mostrarme sus melodías, la primera de ellas es Enteógeno, una canción ambiental basada en notas de guitarras con efectos que nos envuelve, al estilo de un videojuego de thriller de misterio, casi como si estuvieras en la sala de estar de una casona antigua y grande, mientras algo grande está a punto de pasar, pero ese algo grande es el misterio: algún espíritu, un asesinato, algo que te tiene expectante y con los nervios de punta; son ocho minutos de lira y bajo sumergiéndonos en un mar de ansias que te toca cada nervio. Por otro lado, Choyeros ya es una rola más al uso, comienza con un riff de bajo fuzzeada, para luego unirse lira y batería, se acompañan con una voz con delay o chorus, con la que vuelve aún más penetrante el sonido garagero y opresivo de la rola. Como mencioné, se nota que apenas comienza, y el reto de ser una banda de un solo hombre es mucho, pero ya nos da unas buenas pinceladas de lo que, con buen trabajo, puede ser un ruido bastante chingón.
Para que estén al tanto de la música que va sacando Atiza y lo apoyen en este nuevo proyecto:
Para estar al tanto de su actividad:
Por otro lado, el carnal Jesús Montsanto, el cerebro detrás de este proyecto llamado Montsanto, vuelve al ataque con un doom tétrico y bien formado, con cuatro rolas (hasta ahora) que conforman su nuevo material, El mundo de los muertos. En este nuevo álbum, al menos de lo que se ha lanzado de él, Jesús sigue el camino trazado en su anterior álbum, una música tétrica, agresiva y potente, una voz áspera y dura que emula lamentos que vienen del averno para hacer juego con el fuzz y el riff de cada rola, también se siente la fuerza, muy cabrona, al momento de ejecutar y transmitir esa maldad a la que le canta. No quiero adentrarme mucho en cada rola, no porque no lo merezca, sino porque quiero hablar de todas las rolas en conjunto cuando el material esté listo, sin embargo, decir que es un doom bien hecho y que logra hacernos sentir la desesperación y la asfixia de la condena a la que todos estamos sometidos. Espero pronto esté completo este álbum tan prometedor (o que me confirme que sólo serán cuatro rolas) para adentrarme y ahora sí hablarles como se debe de este nuevo ruido que trae a nosotros Montsanto.
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