El pasado 25 de junio de 2022, la banda cedemexera Fuzz Brigade lanzó en plataformas digitales su Lp debut titulado Rey de la muerte, condensando años de trabajo arduo y paciente. Tiempo después de la disolución de Powertrip (un gran power trío mexicano), por ahí de 2014, Alfred Guzmán en los tamborazos, Ademark Pérez en las cuerdas gordas y Adín Guzmán en las cuerdas estridentes y las cuerdas vocales, dan vida a Fuzz Brigade y comienzan sus andanzas con un stoner rock bastante potente. Después de años de paciencia en la composición y perfeccionamiento de cada uno de los temas, de presentaciones en vivo donde han mostrado de qué son capaces y el poder de sus riffs, al fin tenemos un producto de enorme calidad en cuanto a mezcla, producción, composición, ejecución y sonido.
El disco incluye siete temas llenos de riffs intensos, referencias al cine de terror y una innegable influencia del stoner noventero y de los dosmiles, así como del sludge, el hard rock, el doom y el harcore. El material debut de esta enorme banda es prueba de que las cosas buenas toman tiempo, pues después de escucharlo, deja bien clara su propuesta: un stoner pesado, agresivo, con un sonido de bajo choncho, fuzzeado, con mucho ataque y presencia, una lira pesada con riffs bien desérticos por momentos, por otros cae en los oídos como una bomba que nos sacude, la batería con grooves bien adecuados al sonido de las canciones: de momentos tranquila, con leves golpes, de repente Alfred deja caer su furia sobre los tambores y los platillos para darle el punch necesario a cada rola cuando es necesario, mientras la voz, violenta, áspera y calamitosa de Adín nos transmite el horror al que Fuzz Brigade le canta. La canción con la que abren el Lp es la que le da título: Rey de la muerte, comienza con riff de bajo con referencias un tanto orientales, se le une la voz de Adín con algo de chorus, la batería con un golpeteo bajo pero bien definido y la guitarra complementando el riff. En el puente se repite la fórmula del intro: sólo bajo y voz quedan para llevarnos al clímax de la canción: una breve pausa, y todo explota en un poderoso combo de todos los instrumentos en conjunto a una voz que refleja angustia y rabia, sin duda, un cambio bastante efectiva que nos lleva al meollo de la rola.
Shot in the head es el segundo track, que también inicia con el bajo, seguido de un par de acentos que ponen guitarra y batería, seguido de un breve silencio y la entrada in crecendo hacia la parte medular de la canción. Se trata de una rola totalmente melódica, en la que los riffs y el sonido de la lira nos remiten a bandas como Wo fat, Fatso Jetson, Fu manchu, el ritmo más movido y el crujir del bajo de Ademark se convierten en vehículos hacia el desierto, hacia la seseante carretera mientras los cactus posan en la orilla y la velocidad a la que transitamos el asfalto se vuelve estrepitosa, nos llena de adrenalina. En la misma tónica, Valley of blood es una canción para ir a toda velocidad en un Impala en medio de ningún lugar salvo arena, cactus y coyotes bañados por la luz bermeja de un sol que cae a plomo por el poniente, convirtiendo así la experiencia del disco en un viaje donde el rugir de los instrumentos, y en este tercer track del Lp, la voz de Ademark, son los estridentes sonidos que hacen retumbar todo en el camino.
La cuarta rola, Resurrección, es una amalgama interesante de un stoner desértico y agresivo, momentos muy pesados en contraste con pasajes melódicos con un canto limpio donde se alargan las notas de la voz; casi como la impostergable noche, este track llega a hacer contraste con los dos anteriores en cuanto a que es más pesado y agresivo. Speedball, siguiente track, destaca bastante por su sonido hardcorero, rápido, su batería veloz y potente y los riffs más cercanos a, por ejemplo, Black flag. Acompañado de una voz en off, nuevamente de Ademark, baja el tempo por algunos compases, para volver con un remate de batería donde Alfred hace gala de enorme capacidad como bataco, le sigue un momentáneo pasaje vertiginoso y termina de forma súbita.
Pazuzu rising, cuyo nombre ya nos refiere el homenaje a uno de los grandes clásicos del cine de terror, es creo que es la pieza donde más se nota la influencia doom de la banda: un ritmo lento y una melodía tétrica. A mitad de la canción, después de un breve descanso con un sonido semejante de caja melódica de fondo, cambia el beat de la canción a uno más rápido pero manteniendo esa atmósfera amenazante; a mi juicio, una forma muy chida de mantener la tensión mediante el sonido doom del inicio y el stoner al que se mueven, haciendo de este pasaje como si fuera el momento álgido, donde la amenaza del demonio Pazuzu es perceptible con mayor fuerza y nos causa inquietud porque no lo vemos. Selva extrema es el track elegido para cerrar todo el Lp de Fuzz Brigade, una rola que inicia con bajo y batería con groove bastante movido y que nos regresa al desierto, al sonido noventero, con riffs de guitarra bastante ágiles, acompañando y dándole fuerza a la base de bajo y batería que se crea desde un inicio; más adelante, el bajo se queda solo, sonando ponchado y con un toque de fuzz que le da mucha fuerza, luego entra la batería a darle un beat muy bueno y la guitarra haciendo algunos adornos que le dan un toque psych a la canción; todo ello da la sensación de estar en medio del desierto, esta vez de noche, contemplando el cielo despejado.
Rey de la muerte es un disco variado en cuanto a la forma, los contrastes y lo que cada rola transmite: impera el stoner rock, pero también tienen toques doom, hardcore y hasta psych. Es un Lp muy bien pensado, a nivel de composición y sonido, se percibe un trabajo muy bien logrado. Sin duda, repito, el tiempo apremia a los que esperan, y la paciencia con la que Fuzz Brigade hizo este Lp rindió sus frutos en un deleite sonoro de frecuencias pastosas y pesadas, evocadoras del desierto así como del terror. No podría decir cuál de las canciones es mi favorita, pues disfruté cada una, tanto en la grabación como las ocasiones que hemos coincidido en vivo.
Por último, el próximo 2 de julio, en Alitas fast (Av. Melchor Ocampo 454, cerca de metro Chapultepec), en punto de las 6 pm, Fuzz Brigade estará promocionando este material acompañados a bandas muy chidas de la escena nacional. No se lo pierdan, el cupo es limitado.
Para seguir su actividad:
Para escucharlos y comprar la versión digital del disco:
Stonedge Fest II:
-Mack
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